¿Por qué eres diferente, Moca, cuando
lo único que queremos es que seas igual? ¿Por qué no puedes estudiar? ¿ Por qué
no puedes conservar un empleo? ¿Por qué no hay quien te ame?, es lo que sonaba
en su cabeza, preguntas hechas todos los días por su padre, preguntas que
chocan entre sí, que aturden y duelen más que los golpes, las patadas y los
piquetes que lo tienen tirado en el piso rodeado de tanta gente que descarga su
odio en él.
La música ya no se escuchaba en sus
oídos, hacia rato que los audífonos salieron huyendo al suelo, pero no eran
necesarios, la canción se repetía una y otra vez en su mente, "me dejaras
dormir al amanecer entre tus piernas, entre tus piernas".
Tocar el tatuaje
del corazón alado, sellado en su pecho era como impregnar sus dedos del fuego y
el olor de Mariana, y la pensó... lo único importante en su vida, dejo el
cuerpo cada vez más insensible y voló a sus brazos, se acurruco en su mirada,
aspiro el perfume de su cuello, se hundió en ella y decidió morir entre sus
piernas. Porque sabía que se estaba muriendo...
Compraron dos boletos de camión con
destino Durango-Monterrey aparentar ser un pasajero era sencillo, las cosas se
complicaron cuando su mente estaba puesta en la señal de su compañero, y su
mano ocupada dentro de la pequeña maleta de viaje, forcejeando con la llave
stilson que estaba atorada entre la ropa. Un pequeño parpadeo, un desvío de la
mirada para desatorar la llave de entre los trapos lo distrajo del segundo
exacto en el que Fercho se levantó del asiento y una vez parado en el pasillo
dio el grito esperado, Este es un asalto, y después un silencio que sólo cortó
el vaivén del cuchillo en la mano de su amigo, y mientras la música seguía,
" me veras volar sobre la ciudad de la furia".
Moca nervioso logra sacar la
herramienta, y de un salto se encuentra al lado de Fercho, sus miradas llenas
de adrenalina chocan, sacan chispas que logran ocultar el miedo que como
parásito se les instala en el estomago. " donde nadie sabe de mi, y yo soy
parte de todos".
Mientras tanto los pasajeros
dócilmente empiezan a desprenderse de anillos, relojes, ipods, que van dejando
en la gorra que Fercho les extiende con mano temblorosa.
Moca cuida a los pasajeros, empuña la
llave grifa decidido a machacar la cabeza de cualquier pendejo pasado de listo,
siente que su corazón se acelera, cuenta los minutos para que termine esta
mierda en la que se ha metido, "nada cambiara con un aviso de curvas, en
sus caras veo el temor", y no es que se arrepienta al contrario nunca le
ha tenido miedo a nada, ni a nadie, la vida para el no es lo suficientemente
atractiva, "ya no hay fábulas", esta llena de vacíos, vacíos que
nunca le ha interesado llenar, porque no le gusta pensar, porque ha decido
aceptar que no sirve para nada, y que nada es para el, "en la ciudad de la
furia", porque hace mucho que dejó de intentar llenar las expectativas de
sus padres, del mismo " me veras caer como ave de presa", porque la
vida es una hija de la chingada, mal parida que arrastra a todo el que este en
ella, " me veras caer sobre terrazas desiertas", porque esta harto de
no tener dinero, porque todo es dinero, porque sin el no se es nadie, porque se
siente inmensamente solo y abandonado en un mundo desechable donde te pasas
buscando una felicidad que se usa y se tira.
" te desnudaré por las calles
azules", sólo coger con Mariana lo hacia sentirse eterno.
"me refugiaré antes que todos
despierten".
Hace rato que dos hombres sentados a
un asiento de donde esta parado Moca, cuchichean, se han dado cuenta que el
muchacho de los audífonos, esta distraído, no empuña una pistola, a la cuenta
de tres deciden amagarlo y caerle encima.
Logran someterlo, Moca siente como el
miedo se le clava en el corazón con cada latido, como su cuerpo cae hacia atrás
cuando una explosión de dolor le golpea, unas manos estrellan la llave una y
otra vez sobre su cabeza. "ese destino de furia es lo que en sus caras
persiste".
Fercho entra en pánico se da cuenta
que están linchando a su amigo, no lo alcanza a ver, pero si escucha sus gritos desgarrados. Despavorido
corre a la parte delantera del camión y le pide al chofer que le abra la puerta
y de un salto desaparece en la oscuridad.
Moca ya no siente nada, sus ojos
apenas unas rendijas perciben caras que gesticulan, bocas que escupen palabras,
manos que martirizan una piel que va perdiendo el calor.
La punta de sus dedos toca el tatuaje
del corazón alado, piensa en Mariana y decide morir, "entre sus piernas y
desaparecer entre la niebla". ¿ Porqué no hay quien te ame Moca?. Un
borbotón de sangre desliza el vuelo de un hombre alado que nunca pretendió
extrañar la tierra. "me veras volver, me veras volver..."
Mariana jamás volvió a ver a Moca,
Ella recuerda todos los días intensamente la noche de amor de donde viene el
niño que espera.
A
Gustavo Cerati que sigue perdido entre la niebla.